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De gran amabilidad, los conejos californianos son sin duda una raza de conejo muy bien adaptada al ser humano, ofreciendo una sensibilidad muy destacada, así como buena confianza e inteligencia que le permiten interactuar y aprender cosas nuevas, además de que físicamente también es un ejemplar muy admirado y valorado no sólo en su país natal, sino también alrededor del mundo.
Características de los conejos californianos
El conejo californiano es un tipo de conejo grande, ya que su peso se encuentra entre los 3,5 Kg y los 4 Kg, mientras que hay ejemplares que pueden incluso superar esta cifra.
Destacan sus orejas que se pueden presentar en varias longitudes, aunque tienden a ser bastante alargadas y redondeadas.
Su pelaje es bastante característico, ya que se adapta al entorno en el que viven, muy especialmente en base al clima.
En principio, podemos encontrar ejemplares con diferentes tonalidades que van desde el marrón oscuro al azul, blanco, chocolate, azul y lila, pero cuando está en zonas frías, tenderá a ser más oscuro que en el caso de encontrarse en zonas cálidas, donde pasará a ser de colores más claros.
No obstante, el color estándar de esta raza sería el fondo blanco con zonas como orejas, nariz, patas y cola pigmentadas con negro.
Comportamiento
Los conejos californianos son cariñosos y sociables, tanto con otros conejos y mascotas como con el hombre.
No obstante, necesitan un periodo de adaptación, ya que cuando no nos conocen, se comportarán de forma tímida y huidiza, pero en cuanto empiece a confiar en nosotros, pronto querrá estar todo el rato acompañado y jugando.
Es muy inteligente, e ideal para familias con niños pero siempre y cuando sea tratado con delicadeza, ya que de lo contrario se tornará asustadizo, y es difícil conseguir que vuelva a confiar en nosotros.
Alimentación
Ese conejo no tiene particularidades en su alimentación, salvo el hecho de que, al ser un animal grande, es importante que consuma las proteínas y fibra necesarias, sobre todo durante su crecimiento y hasta que cumpla un año y medio.
En cuanto al resto, deberá contar siempre con heno, al ser posible procedente de la alfalfa, así como pienso y agua limpia, mientras que cada día le daremos verduras frescas y sobre todo verdes, con la particularidad de que también podemos añadir a su dieta la fruta fresca, pero tan sólo un par de veces por semana.
Reproducción
Esta raza de conejo alcanza la madurez sexual alrededor de los cinco meses de edad.
Sin embargo esto puede ser un problema para la hembra, afectando negativamente a futuros partos, por lo que impediremos que el macho la monte al menos hasta que haya alcanzado los 10 meses de edad.
En cada parto puede llegar a alumbrar 10 ejemplares, siendo el mínimo normalmente de cuatro crías, aunque por supuesto se pueden dar casos con más de 10.
La gestación dura entre 29 y 31 días, por lo que vale la pena llevar la cuenta para evitar problemas en el parto.
Salud del conejo californiano
Su salud es resistente, aunque tiene tendencia a resfriarse, y un resfriado mal curado puede desembocar en neumonía.
Por ello regularemos la temperatura, además de que por supuesto le pondremos las vacunas de la mixomatosis y la fiebre hemorrágica, las cuales son obligatorias.
Cuidados
Su jaula debe ser amplia y bien acomodada, con un suelo suave y al ser posible mullido, evitando así los problemas en las patas.
En cuanto a su pelo, es importante que sepamos que es delicado, por lo que es necesario utilizar un cepillo especial, y en ese caso, podremos cepillarlo sin problema un par de veces a la semana, retirando así los pelos que se van desprendiendo antes de que se acumulen y puedan ser ingeridos por el animal.
Todos los días debe salir de la jaula unas horas para poder practicar ejercicio, y recuerda que se trata de un animal muy sociable, por lo que si vive en soledad, puede acabar deprimiéndose con mucha facilidad, así que debemos jugar con él y compartir buenos ratos.
Por supuesto, hay que mantener una buena higiene en su jaula, retirando de forma diaria toda la materia orgánica como heces, restos de alimentos y orina que se haya acumulado.
Lo ideal es poner virutas de madera o serrín en el fondo de la jaula, ya que así evitaremos la humedad que puede ser muy negativa para su salud.