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El conejo gigante de Flandes es una raza de conejo doméstico denominada por su nombre científico Oryctolagus cuniculus domesticus, y se caracteriza por ser una de las razas más grandes de todos los lepóridos, pudiendo llegar a alcanzar los 80 cm de largo, e incluso superarlo en el caso de algunos ejemplares, y presentando características particulares que vamos a conocer a continuación.
Características de los conejos gigantes de Flandes
El conejo gigante de Flandes es uno de los conejos más grandes del mundo, y se presenta con distintas características que lo convierten en un animal muy particular.
Comenzamos con su cuerpo, el cual es de grandes dimensiones puesto que incluso puede superar los 80 cm de largo en algunos casos. De hecho, el ejemplar más grande conocido hasta la fecha medía por encima de 1,30 metros de longitud.
Su peso generalmente se encuentra alrededor de los 7 Kg, mientras que hay ejemplares que pueden alcanzar los 10 Kg. Su pelaje es corto, por lo que se trata de un animal bastante limpio y que requiere menos cuidados y aseo.
Se puede presentar con diferentes tonalidades, tanto monocromo o más habitualmente en combinación entre negro, blanco, azul, marrón, gris claro y gris acero.
Comportamiento
Al tratarse de animales de grandes dimensiones, tienen un carácter más dócil, por lo que es un buen animal de compañía incluso para hogares con niños.
Pero para conseguir una unión adecuada con ellos, lo ideal es tenerlos desde que son pequeños, ya que si el ejemplar ha sido maltratado o no ha tenido compañía frecuente de humanos, puede que nunca llegue a desarrollar su amistad con ellos.
De hecho, tienen tendencia a desarrollar miedo cuando no están en un lugar tranquilo en el que se sientan seguros.
En algunos casos poco habituales en los que el trato no es el adecuado, pueden incluso llegar a desarrollar agresividad, e incluso ser peligrosos debido a sus dimensiones y peso.
También se llevan bien con otros conejos y otras mascotas, por lo que la introducción a la familia suele ser sencilla.
Alimentación del conejo flandes
Debido a su tamaño, es un animal que requiere de grandes cantidades de comida cada día, un dato importante y que debemos tener en cuenta antes de su adopción.
En cuanto a los alimentos, serían los mismos que para cualquier conejo, es decir, deberá tener siempre heno y pienso disponibles, mientras que deberemos facilitarle verduras frescas diarias, y de forma ocasional, algo de fruta, preferiblemente manzana.
Durante el crecimiento es muy importante que nos aseguremos de que recibe un extra de proteínas, ya que deberá desarrollar su masa muscular adecuadamente, y es que seguirá creciendo hasta alcanzar al menos un año y medio de edad.
Reproducción del gigante de flandes
La madurez sexual suele llegar a partir de los cuatro meses de edad, pero es muy importante que, antes de que esto ocurra, separemos machos y hembras para evitar la reproducción.
Deberemos dilatarla hasta que cumplan al menos un año y medio, ya que es cuando alcanzan la madurez sexual y su peso ideal.
Aunque los criadores generalmente limitan la reproducción hasta los tres años de edad en las hembras, lo cierto es que su ciclo reproductivo puede llegar hasta los ocho años.
Una vez embarazada, la gestación dura alrededor de 30 días, pudiendo tener hasta 12 ejemplares en un solo parto, aunque la media se encuentra en alrededor de seis por parto.
Salud del conejo gigante de Flandes
Además de la necesidad de vacunarlos para prevenir enfermedades víricas como la fiebre hemorrágica y la mixomatosis, el conejo gigante de Flandes presenta algunos aspectos de su salud para los cuales debemos extremar las precauciones.
Los problemas en las articulaciones son más frecuentes que en otras razas debido a su peso, y a la facilidad con la que pueden alcanzar el sobrepeso.
Por ello es importante que cuidemos su alimentación y garanticemos la ingesta adecuada de proteínas.
También son más frecuentes los problemas cardiovasculares, por lo que es importante que realicemos un control veterinario regular a través de revisiones que serán las que permitan detectar problemas de salud con antelación suficiente.
Otro cuidado con respecto a su salud es la desparasitación, tanto de internos como de parásitos externos, ya que de este modo evitamos muchos riesgos innecesarios.
Los cuidados del conejo flandes
Hay que partir de la base de que estamos hablando de un animal de considerables dimensiones, lo que significa que necesitaremos una jaula madriguera en la que pueda encontrarse con espacio suficiente para moverse con libertad.
A su vez, también necesita de espacio adicional para correr y hacer ejercicio, algo muy importante si queremos garantizar su salud y calidad de vida así como felicidad.
De hecho, se recomienda sólo adoptar a esta raza en caso de disponer de mucho espacio exterior, al ser posible una habitación muy grande que le podamos dedicar en exclusiva, o un corral en el que se pueda sentir libre.
Es importante que disponga de una zona en la que no sea molestado, además de que debemos prevenir los ruidos fuertes y prolongados, ya que le causan un elevado estrés.
El suelo sobre el que pise, en la medida de lo posible será de tierra suave y blandita, ya que tiene un peso considerable, por lo que las patas pueden sufrir sobre suelos muy duros o cuando están en jaulas de barrotes (mucho cuidado con esto último por el riesgo de lesión).
Fotos de Conejo de Flandes
