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En un primer momento, el pura raza español nació de la necesidad de conservar los caballos andaluces ante el riesgo existente de su desaparición por el mestizaje que se vio acentuado tras la entrada de otras razas procedentes de diferentes países y que se acababan mezclando con la española.
En vista de esto, varios criadores se afanaron en combinarlos y lograr una raza que presentase las características que conocemos a día de hoy de este animal, que incluyen fuerza, inteligencia y capacidades que lo sitúan entre los mejores caballos del mundo así como también en uno de los más antiguos.
Su belleza hizo el resto, creando la combinación perfecta para convertirlo en un caballo ideal para la monta y la exhibición, ofreciendo resultados sensacionales en rejoneo, doma clásica y doma vaquera entre otras disciplinas.
De igual manera, acabó haciendo sus pinitos en los Juegos Olímpicos, demostrando al mundo entero su calidad y atrayendo las miradas de multitud de países que lo incorporarían a su listado de favoritos.
Al existir una amplia variedad, podemos encontrar ejemplares que parten de precios de alrededor de 3.000 €, alcanzando incluso hasta los 150.000 € en el caso del más caro. Sin embargo, la media general se encuentra alrededor de los 40.000 € para el caballo andaluz o pura raza española.
Características de los caballos pura raza español (PRE)
Estas son las principales características que podemos destacar del PRE, pudiendo así conocerlo mejor y descubrir algunas de sus diferencias más notables con el resto.
Cuánto viven
Se trata de una raza que puede llegar a alcanzar los 35 años en el caso de los ejemplares más longevos, aunque la mayoría se suele quedar por debajo de los 30. La edad mínima está establecida sobre los 25 años.
Alza
La altura a la cruz de los caballos pura raza español parte de los 155 cm y puede llegar a superar los 175 cm, convirtiéndose en un animal considerablemente alto en comparación con otras razas similares.
Capa
Se trata de una raza que puede presentarse con prácticamente cualquier color, e incluso en combinaciones muy variadas. Pese a ello, la tonalidad más apreciada es el tordo, destacando de forma general los colores oscuros en la mayor parte de ejemplares.
Cabeza
Su cabeza no es demasiado destacable, ya que tiene un tamaño mediano, lo que hace que el resto del cuerpo adquiera mayores dimensiones. Sin embargo, si tenemos que destacar algo de ella, es la expresividad de sus grandes ojos negros que transmiten confianza. Las orejas son medianas y tienen una forma triangular muy característica.
Cuello
Pese a que su cuello es fuerte y musculado, ofrece una buena flexibilidad. En cuanto a longitud, es de tamaño medio
Cuerpo
Su aspecto musculoso y bien proporcionado son dos de las insignias de esta raza de caballo que destaca por ser una de las más corpulentas de todo el mundo. Además se puede observar un lomo de longitud corta pero de buena anchura y con un pecho bastante prominente, lo que le confiere una apariencia más potente.
Sus extremidades destacan por su larga longitud, a la vez que también son musculosas y robustas, confiriendo al conjunto una imagen de gran fortaleza. En cuanto al peso, generalmente no excede de los 650 Kg, pudiendo descender hasta los 400 Kg dentro de la media de esta raza.
Su cola destaca por ser muy espesa y larga, algo similar a lo que ocurre con sus crines, lo cual le otorga un toque más majestuoso.
Temperamento
Estamos ante un caballo con un equilibrio admirable, pero con particularidades que son las que lo hacen único en el mundo. Entre sus aspectos positivos tenemos su elevada inteligencia, su fuerza, paciencia, respeto, capacidad de vincularse con el dueño, valiente, tenaz, osado y con una capacidad de recuperación muy notable.
Sin embargo, también se trata de un animal que tiene un carácter fuerte, de manera que es esencial que se mantenga un vínculo adecuado con él, para lo cual es necesario garantizar la paciencia y equilibrio en los entrenamientos, maximizando el respeto, lo cual le hace reforzar sus objetivos y conseguir mejoras sustanciales en poco tiempo.
Orígenes del caballo pura raza español (PRE)
Para poder conocer los orígenes del caballo pura raza español, es importante entender que estamos hablando de una de las razas de caballo más antiguas de todo el mundo que todavía se conserva.
De hecho, es de las pocas autóctonas que han conservado su pureza a lo largo de los siglos, y es que estamos hablando de un animal que procede de los caballos de los íberos, lo que implica que es un caballo endémico de España.
Se calcula que el caballo pura raza español podría tener más de 20.000 años de historia, y se ha mantenido desde entonces sobre todo gracias a sus cualidades, que lo han convertido siempre en un gran atractivo para las diferentes poblaciones que se fueron asentando.
Historia
En un primer momento, el caballo pura raza español fue utilizado fundamentalmente como caballo de guerra, tanto por parte de los íberos como de guerreros que fueron llegando con posterioridad a la península.
De igual manera, también era utilizado con frecuencia en otros menesteres como la agricultura y la caza, sobre todo para realizar labores difíciles, ya que se trata de un animal fuerte, con energía y una muy buena capacidad de recuperación, adaptándose sin problemas a las diferentes temperaturas de cualquier situación, tanto por debajo de cero grados, como por encima de los 40 ºC.
Durante la época romana, se sabe que eran muy utilizados para participar en los circos romanos así como en las diferentes exhibiciones que se realizaban en la época.
No obstante, fue a partir del siglo XII cuando apareció una creciente preocupación sobre el mantenimiento de la raza, ya que cada vez era más frecuente observar que estos caballos, puros hasta la fecha, se iban mezclando con otras razas.
Esto preocupó mucho sobre todo a reyes y nobles que tenían al caballo como un símbolo, ya que con el paso del tiempo, esto hubiese significado su desaparición, de manera que a partir de entonces se buscaron soluciones que pasaban por la prohibición de cruzar a los caballos andaluces con otras razas diferentes.
Gracias a ello, en poco tiempo la raza hizo frente a este peligro y se recuperó, pero no sin dificultad, y muestra de ello es que la ley que impedía estos cruces estuvo vigente hasta el siglo XIX, lo que suponía más de 700 años de vigor para proteger al caballo andaluz o pura raza española.
De hecho, un aspecto destacable de todo este periodo es que los propietarios se esmeraron en buscar y reproducir los ejemplares más puros de todos, algo en lo que la nobleza participó activamente.
Gracias a ello, en la actualidad se sigue conservando con la máxima pureza que le permite garantizar sus cualidades.
Sin embargo, ya hacía cerca de un siglo que las carreras de caballos se estaban empezando a popularizar, lo que hacía que muchos de los que estaban interesados en estos caballos, poco a poco fuesen buscando otros menos pesados y más ágiles que garantizasen mejores resultados en las carreras.
No debemos olvidar que se trataba de un deporte que movía mucho dinero, por lo que poco a poco, los PRE fueron siendo dejados de lado aunque no olvidados del todo.
Pero las aguas pronto llegarían a su cauce, reforzadas por la creación del primer libro de inscripción del pura raza español en el año 1912, y la posterior creación en el 1972 de la Asociación Nacional de Criadores de Caballos Españoles, que darían suficiente aliento para recuperar su lugar en importancia y seguir conservándose como una de las razas de caballo más antiguas del mundo.
Fotos de Caballos pura raza español (PRE)
