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Los caballos albinos son una raza muy interesante por el hecho de presentar unas características bastante particulares, siendo animales que han sido denominados de esta forma debido a su falta de pigmentación.
Se trata de un interesante cruce de sangre fría y sangre caliente que presenta una gran habilidad, siendo mundialmente reconocido sobre todo por su temperamento.
Su elevada inteligencia es otra de las particularidades que presenta, siendo a menudo utilizado para trabajos de ganadería, sobre todo a la hora de organizar los rebaños. Además, también es habitual verlo en rodeos así como en diferentes tipos de exhibiciones, ofreciendo una apariencia elegante y muy estética.
La raza de caballo albina se presenta con unos precios bastante contenidos con respecto a la mayor parte de razas y variedades, ya que podemos encontrar ejemplares generalmente a partir de los 1.500 € y hasta los 10.000 €, atendiendo a la edad, particularidades del ejemplar y características de cada uno.
En cuanto al precio medio, se suele situar alrededor de los 6.500 €.
Características de los caballos albinos
Sin duda alguna estamos ante un tipo de caballo muy llamativo, elegante y con características bien definidas, de las cuales podemos destacar las que indicamos a continuación.
Cuánto viven
Los caballos albinos suelen tener una esperanza de vida que va desde los 25 a los 35 años, aunque algunos ejemplares pueden vivir hasta los 40. No obstante, hay que tener en cuenta que los cuidados y la atención son determinantes en este aspecto.
Alza
La altura hasta la cruz del caballo albino es bastante estable, ya que la gran mayoría de ejemplares cuentan con entre 150 cm y un máximo de 160 cm. Cabe destacar que en algunos casos estas cifras se pueden ver reducidas o rebasadas, pero no es demasiado habitual.
Capa
Su capa es muy característica ya que la mayoría de casos es blanca, aunque se pueden presentar variaciones con tonalidades crema.
Cabeza
Su cabeza está muy bien dibujada, con un buen largo y caracterizada por las pestañas blancas, ojos azules, rojos o rosados, y la zona del morro rosada.
Cuello
Su cuello es largo y fuerte, con una anchura media pero que ofrece una buena robustez.
Cuerpo
Su cuerpo tiene un peso de alrededor de 500 Kg, y está muy bien equilibrado. Sus patas son largas y resistentes, confiriéndole un fabuloso equilibrio entre potencia, fuerza y velocidad.
Es un animal muy elegante en su conjunto, de ahí que sea frecuentemente utilizado en exposiciones y para la realización de ejercicios.
Temperamento
Tiene un temperamento muy dócil y agradable. Destaca el hecho de que denota una paciencia asombrosa, lo que permite trabajar con ellos incluso con ejercicios complicados. El caballo albino es un gran compañero para el jinete, y muestra una gran fidelidad, ofreciendo una relación muy positiva con niños e incluso con otras mascotas que haya en su entorno.
Hay que destacar que estamos hablando de un caballo muy inteligente, no sólo porque aprende rápido, sino también porque tiene la capacidad de crear un vínculo emocional con otras especies animales, incluyendo por supuesto al hombre.
Orígenes del caballo albino
Los primeros pasos para la aparición del caballo albino se produjeron en Europa, por allá por el siglo XV aproximadamente. Sin embargo, no adquiriría una gran representación hasta que en el siglo XVI fue trasladado a Estados Unidos por parte de los colonos, proceso que se vio extendido a lo largo de prácticamente todo este siglo más el siglo XVII.
Historia
Una vez que esta raza de caballo comenzó a expandirse en América, fue empezado a tomar en consideración, pero no adquiriría toda la importancia merecida hasta el año 1937, cuando fue reconocido como raza.
El caballo albino que conocemos a día de hoy es el resultado de la mezcla realizada entre el semental blanco y la yegua Morgan, una combinación que daba lugar al defecto genético que se produce y que desemboca en una falta de pigmentación.
Dicha mezcla se realizaría aproximadamente a principios del siglo XX, convirtiéndose en uno de los caballos blancos más característico y con particularidades más definidas.
Pronto se conocerían sus aptitudes, las cuales fueron desarrollándose con el paso del tiempo, hasta el punto en que el animal empezó a demostrar que podía ocupar un lugar importante no sólo en el transporte de personas, sino también en numerosas tareas, la mayor parte de ellas en el campo. La agricultura quizás no era su fuerte más destacado, pero sin embargo, la ganadería se le daba estupendamente bien.
La sencillez con la que se dejaba montar y su característica de ser tranquilo y gozar de una gran paciencia, lo hacían fantástico no ya sólo para el entrenamiento y hábito al trabajo, sino a la hora de llevar a cabo largas jornadas de pastoreo, incluyendo jornadas alargadas por los problemas que en ocasiones se producían durante esta práctica.
Con el paso de los años, su estética lo hizo ser considerado más que un animal de trabajo, por lo que a mediados del siglo XX comenzó a ser considerado como un interesante aspirante para las exhibiciones y la realización de diferentes ejercicios para los que mostraba una gran habilidad.
Todo esto fue gestando lo que a día de hoy conocemos como caballo albino, ofreciendo un comportamiento excelente, una calidad indudable, una buena tenacidad y una paciencia admirable, y creando un entorno de trabajo muy satisfactorio.
Esto también se ha visto mejorado gracias a su destacable inteligencia, siendo a día de hoy uno de los caballos más apreciados para las muestras y las exhibiciones que se celebran a lo largo de todo el mundo.